Cristiano Ronaldo dejó el Real Madrid en verano de 2018. El Bernabéu entró en pánico: ¿cómo mantener el estatus del equipo? ¿Quién iba a meter sus tantos, a razón de uno por partido (450 en 438 duelos durante nueve temporadas)? Zidane mantuvo la calma y encontró a Benzema, ese al que habían señalado como «un nueve sin gol». Desde la 18-19, marcó 162 dianas en 236 encuentros.
El ariete francés abandonó el club merengue en verano de 2023. El Bernabéu entró en pánico: ¿cómo mantener el estatus del equipo? ¿Quién iba a meter sus goles? Ancelotti mantuvo la calma y creó un espectáculo coral, progresivo, dinámico y de apariencia sencilla que mantiene perfectamente el equilibrio de la plantilla, ya que apunta a un doblete Liga-Champions, y ha repartido perfectamente la responsabilidad goleadora: hasta cinco futbolistas con cifras dobles en un conjunto que está volando en la recta final de la temporada.
Jude Bellingham (23), Vinícius (23), Rodrygo (17), Joselu (16) y Brahim (12), 91 goles en total a falta de tres partidos, han hecho olvidar con creces la ausencia de Benzema, cuyo rendimiento global como madridista fue de 354 dianas y 165 asistencias en 648 duelos.
Uno a uno
Ofensivamente, el arranque del curso enganchó a todos con el pie cambiado. A todos… menos a Jude Bellingham. Sin la inesperada irrupción del inglés, el Madrid no habría fabricado su colchón de seguridad. Marcó cinco goles en sus cuatro primeros partidos de Liga -aseguró siete puntos- y sostuvo el 'invento' de Ancelotti: sin un 'nueve' como Benzema, el italiano 'desestabilizó' al equipo metiendo a Rodrygo y a Vinícius más hacia el centro, dando 'vuelo' a sus laterales y permitiendo la llegada del británico, el gran beneficiado del curso: jamás había pasado de 20 participaciones en goles en una temporada (14 tantos y seis asistencias con el Dortmund) y está cerca de doblar sus dígitos: 23 goles y 12 pases decisivos en la 23/24.
Con las ausencias por lesión o sanción del inglés y la adaptación al nuevo sistema, los brasileños fueron calentándose conforme avanzó el curso. El 2024 de Vinícius, por ejemplo, ha sido espectacular. Cerró 2023 con el gesto torcido: las polémicas se añadieron a su rendimiento, de 'apenas' siete goles y tres asistencias. Este año, ya más pegado a la línea de cal (donde demostró ante el Bayern ser el mejor del mundo en su puesto), se ha ido hasta los 16 tantos y ocho asistencias y situarse en 23+11, cifras selladas con un nuevo 'doblete' ante el Alavés.
Tres cuartos de lo mismo le pasó a Rodrygo, desubicado de inicio (llegó a ser el jugador de la Liga con peor ratio de goles anotados por disparos realizados), marcó durante cinco partidos consecutivos en noviembre, volvió a secarse -solo tres tantos hasta mediados de marzo- en 2024… y remontó el vuelo en la recta decisiva: a pesar de un año irregular, está muy cerca de igualar las mejores cifras de su carrera, los 19 goles y 10 asistencias del pasado curso: ya lleva 17+9.
Con lo que nadie podía contar era con los 28 goles de dos 'secundarios' como Joselu y Brahim. El primero, cedido por el Espanyol como un parche pasajero a falta de un 'nueve' puro, ha resultado determinante en muchos encuentros a sus 34 años… sin ir más lejos, en las semifinales ante el cuadro alemán, con un doblete en cuatro minutos. Y el malagueño, a quien vaticinaban pocos minutos ante la pléyade de figuras del mediocampo, jamás había pasado de los siete goles en una temporada completa (lo logró dos veces con el Milan)… y ya suma 12.
Por fortuna, por acierto, por necesidad o por experiencia, Ancelotti encontró la forma de responder a quienes se preguntaban cómo suplir a Benzema sin un delantero centro de categoría mundial. Enarcó su ceja, sacó su mano del bolsillo y señaló a sus futbolistas: «con todos estos».