El español Iván Ortolá (KTM) le arrebató la 'gloria' de ser profeta en su tierra al neerlandés Collin Veijer (Husqvarna) al vencer el Gran Premio de los Países Bajos de Moto3 por apenas 12 milésimas de segundo de ventaja.
Veijer luchó hasta la última curva por ser el primer neerlandés en ganar 'en casa', 35 años después de que lo hiciese por última vez su compatriota Hans Spaan en 1989, pero Iván Ortolá supo jugar sus bazas y, con una estrategia perfecta en la última variante, logró el primer triunfo de la temporada y el tercero de su carrera deportiva.
Mientras Collin Veijer se centró en cerrar el hueco en la frenada de entrada a la variante final, Iván Ortolá se preparó para superarlo por fuera, sin que el neerlandés pudiese hacer nada por evitar la arriesgada pero efectiva estrategia del español.
Ángel Piqueras (Honda) aprovechó su posición en la formación de salida para ser el más rápido en llegar a final de recta, seguido por su compatriota Iván Ortolá (KTM), que no tardó ni una vuelta en superarlo para intentar marcar su propio ritmo.
Hasta siete pilotos tomaron la salida conocedores de que iban a tener que cumplir con una y hasta dos 'vueltas largas' de sanción por rodar demasiado lentos durante los entrenamientos, entre ellos el español Joel Esteba (CFMoto), el primero en cumplir con su penalización, si bien durante la carrera hubo varias sanciones más, casi siempre como consecuencia de cortar la variante de entrada en la recta de meta.
El líder del campeonato, el colombiano de origen español David Alonso (CFMoto), que no tuvo unos buenos entrenamientos y acabó los mismos decimotercero, consiguió recuperar varias posiciones en la primera vuelta, que acabó completando en la octava posición.
Ortolá lideró ese giro inicial perseguido por Ángel Piqueras, Taiyo Furusato (Honda), el ídolo local Collin Veijer (Husqvarna), que sufrió una fuerte caída durante la clasificación oficial, y el resto de favoritos de la categoría, con José Antonio Rueda (KTM), David Muñoz (KTM), Daniel Holgado (Gas Gas) y Adrián Fernández (Honda), entre los españoles.
El japonés Tatsuki Suzuki (Husqvarna), que también estaba en ese grupo, fue una de las primeras bajas, al sufrir una caída en la segunda vuelta que le obligó a abandonar.
Poco a poco el grupo de cabeza se fue definiendo, con nueve pilotos destacados del resto, encabezado por Iván Ortolá y cerrándolo Daniel Holgado, con el japonés Ryusei Yamanaka (KTM) un poco más atrás intentando no perder el contacto con ellos.
Ese grupo lo formaron hasta seis pilotos españoles, Iván Ortolá, Ángel Piqueras, David Muñoz, Adrián Fernández, José Antonio Rueda y Daniel Holgado, el japonés Taiyo Furusato, el neerlandés Collin Veijer y el colombiano David Alonso.
Ortolá y Furusato lograron una cierta ventaja de seis décimas de segundo sobre sus perseguidores, encabezados por Piqueras, el autor de la 'pole position', en tanto que David Alonso era sancionado con la pérdida de una posición por haber adelantado a un rival con bandera amarilla, que cumplió poco después al dejar pasar a David Muñoz.
El grupo se estiró muchísimo, pero sin llegar a cortarse en ningún momento como para pensar que la carrera se pudiese romper, pues el ritmo de la misma no resultó excesivamente alto, lo que permitió a sus perseguidores, con Ryusei Yamanaka tirando y con quien también iban Luca Lunetta, Stefano Nepa y Joel Kelso, que acabasen enlazando con ellos.
Ortolá se mantuvo firme en cabeza de carrera, mientras Collin Veijer decidió pasar a la acción y comenzó a atacar a sus rivales para llegar hasta la segunda posición, a pesar de la decidida respuesta en varias ocasiones del japonés Taiyo Furusato.
A diez vueltas del final Collin Veijer accedió al liderato de la carrera al superar a Iván Ortolá en la curva diez del trazado, para delirio de la afición local y todavía con nueve vueltas por delante, mientras que el español perdía dos posiciones más frente a Taiyo Furusato y David Muñoz.
Ortolá no tardó en recuperar la segunda plaza, sabedor de que dejar a Collin Veijer delante podía romper definitivamente la carrera, mientras que en ese nutrido grupo las 'escaramuzas' y los toques de carenado eran una peligrosa constante.
Esos ataques no hicieron sino facilitar que Collin Veijer lograse una cierta distancia respecto al resto del grupo, que fue de siete décimas de segundo a cuatro vueltas del final, con el líder del campeonato, David Alonso, ya en la segunda posición.
Alonso no pudo aguantar los ataques de Ortolá y Muñoz y, a tres vueltas del final, 'cayó' a la cuarta plaza, aunque no tardó en recuperar una posición, mientras que Collin Veijer se consolidaba en el liderato.
Ortolá supo jugar sus cartas a la perfección en la última vuelta para superar a Veijer por el exterior en la entrada a la última variante del trazado, lo que le permitió lograr la victoria por apenas 12 milésimas de segundo sobre el neerlandés.
La tercera plaza fue para David Muñoz, que superó a José Antonio Rueda 'in extremis', con el líder del mundial David Alonso en la quinta posición y el italiano Luca Lunetta sexto, por delante de Adrián Fernández y Ángel Piqueras. Daniel Holgado acabó en la undécima posición, con Joel Esteban decimoquinto, a pesar de sus dos 'vueltas largas' de sanción.