El UCAM Murcia derrotó (70-79) al Unicaja este miércoles en el quinto y definitivo partido del 'playoff' de semifinales para avanzar por primera vez en la historia del club a la lucha por el título, donde se medirán con el Real Madrid desde el sábado, gracias a otro épico triunfo en el Martín Carpena.

Los de Sito Alonso obraron la gesta con los motivos que tenían para creer después de poner un 0-2 en los primeros encuentros. Asaltar de nuevo la casa del campeón de la fase regular parecía ya rizar el rizo, pero Troy Caupain (19 puntos) y Dylan Ennis (19) lo hicieron realidad, a pesar de que el Unicaja mordió con todo en el inicio del último cuarto para culminar una remontada nunca vista.

Como no podía ser de otra manera, el quinto partido fue una montaña rusa. El Unicaja empezó arriba la primera parte pero, aunque se fue por delante al descanso (32-31), se fue más contento seguramente el UCAM. A los locales le entró todo en su arranque, en especial a Perry, pero los visitantes ajustaron su zona y fueron recuperando terreno del -13 hasta ponerse por delante.

La zona del UCAM funcionó mejor con el 2:3, bajando el acierto malagueño y forzando las pérdidas de los de Ibon Navarro, que se quedaron en siete puntos en el segundo cuarto. Además, a los murcianos le entraron los triples en ese parcial, en especial con un Caupain autor de ocho puntos, encontraron por dentro a Diagné y Ennis completó una presentación valiente para un 32-31.

Los jugadores se fueron a vestuarios entre chispas, Jonathan Barreiro con varios puntos en la boca por un codazo, y las sensaciones aguantaron 'rojillas' en la reanudación. Pese a confirmar su dominio en el rebote, al Unicaja le costó mucho aprovechar esas oportunidades, obcecado quizá con el triple hasta terminar en un mal 12 de 37. Osetkowski lo logró, pero Caupain y Ennis acudieron siempre al rescate de los visitantes (45-46).

Además, la rotación de Sito Alonso dio muchos más puntos y los de Navarro se aferraron al Carpena y su mejor arma en la lucha. Después de otro triple de Perry muy lejano en ese cuarto y sobre la bocina, el Unicaja entró con todo al último gracias al acierto de tres de Alberto Díaz y su intensidad para robar en defensa (65-58).

El pabellón malagueño alcanzó su máximo de decibelios pero el UCAM se hizo digno merecedor del pase a la final aguantando el chaparrón. Sant-Ross y Ennis igualaron el marcador, en un parcial de 2-10 que hizo dudar y mucho a los de Navarro. Mucha tensión y muchos tiros fallados, mientras Caupain se colaba en la zona para rematar.

Sin ganar un partido en casa en los 'playoffs', el UCAM se planta en la primera final de su historia en la Liga Endesa, al mejor de cinco partidos, contra un Real Madrid que tendrá el factor cancha. Condición foránea que no asusta a los de Alonso visto lo visto aunque el físico, además de la categoría del subcampeón de Europa, sí puede marcar diferencias, con el Madrid esperando desde hace tiempo tras un 3-0 al Barça en su semifinal.