«Una fiscalidad inteligente y moderada». El mantra que arrastra Alfonso Fernández Mañueco desde su llegada a la presidencia de la Junta de Castilla y León vuelve a impregnar el proyecto de Ley de Presupuestos para 2024. La cuarta rebaja fiscal de la 'era Mañueco' y la tercera de esta Legislatura se traducirá en 674 millones de euros de beneficios fiscales para empresas y familias, que alcanzarán a 480.000 contribuyentes. Una fiscalidad que volverá a ser «especialmente favorable» para el mundo rural con nuevas medidas como el incremento de la deducción en el IRPF por natalidad para nacimientos en el medio rural que se extiende a casi 130 entidades locales menores de municipios de más de 5.000 habitantes. La segunda medida es la extensión de la bonificación del cien por cien en transmisiones patrimoniales por el arrendamiento de fincas rústicas «con el reto de favorecer la continuidad de esta actividad», y que antes estaba dirigida solo a agricultores profesionales y explotaciones prioritarias. Medidas a las que se añaden la congelación o supresión de tasas y precios públicos o la nueva bonificación del 50% en el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados.
«Nosotros bajamos los impuestos porque incentiva el consumo y la inversión, favorece el crecimiento económico y es compatible con poder mantener unos servicios públicos de calidad», señaló el presidente de la Junta. También se detuvo en las medidas fiscales Juan García-Gallardo, que tomó la palabra después de Fernández Mañueco para anunciar que el Ejecutivo regional ya trabaja «en un cuarto paquete para aliviar la carga fiscal en el bolsillo de los castellanos y leoneses».
Mañueco avala la labor de Cruz Roja y Accem
La denuncia realizada esta semana por el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, acusando a Cruz Roja y Accem de «colaboradores necesarios» con el tráfico ilegal de personas se coló en la rueda de prensa posterior a la presentación de las cuentas. Allí, Fernández Mañueco quiso marcar distancias y destacó la «labor muy importante» de Cruz Roja y Accem, así como del conjunto del tercer sector, «en favor de la sociedad en su conjunto, y de las personas más vulnerables en particular». Mientras el vicepresidente de la Junta, matizó ligeramente sus palabras al afirmar que «las personas que vienen a Castilla y León son todas bienvenidas» como «tierra de acogida». No obstante, reiteró en varias ocasiones que «hoy no es el día para hablar de esto».
Las Cámaras destacan que estimula el empleo
El Consejo de Cámaras de Comercio, Industria y Servicios de Castilla y León consideró «acertado» que el presupuesto de 2024 incluya políticas de estímulo a la actividad empresarial y el empleo. También valoró que se apueste por una «fiscalidad moderada», el medio rural y la «sensibilidad» con los sectores agrícola, ganadero y comercial. Por su parte, la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León (CEOE) ve las cuentas «realistas» y «prudentes», a falta de un estudio detallado de la repercusión que pueda tener en las distintas provincias y en partidas concretas. Además, expresó su deseo de que se ejecuten en su totalidad y con la máxima colaboración público-privada posible, con el fin de aumentar el nivel de eficiencia y productividad.