El próximo 10 de mayo se constituye la junta gestora de Boós, localidad que recuperará la capacidad de gestión de los montes Pedriza y Valdepicarazas, ?Pico del Lomo, Vallejo-Hondo y Valdelosrodrigos, Alto de Valdecubilla, Tallar de Enebro en Boillos, Monte Las Muelas y Valdelasviejas, informa la Asociación Forestal de Soria (Asfoso). La propiedad de estos espacios forestales se remonta al año 1901, cuando 35 personas vinculadas con el pueblo los adquirieron en régimen de proindivisión, dando lugar así a lo que la legislación forestal reconoce como un "monte de socios", un tipo especial de propiedad comunal, privada y a su vez colectiva.
Con la constitución de la junta gestora, los derechohabientes de aquellos compradores (hoy varios centenares) recuperan la capacidad de gestionar los recursos forestales, agrícolas, energéticos y mineros de estos montes. Desde Asfoso muestran su satistacción "por haber podido colaborar en el proceso de recuperación de estos espacios forestales" y felicitan tanto al grupo promotor como a los históricos copropietarios y socios de dicho monte y, por extensión, a todos los vecinos e hijos del pueblo de Boós, por el paso iniciado.
"Su decisión de reinvertir los ingresos que se pudieran obtener de la gestión del monte no sólo en su conservación, sino también en la mejora de la calidad de vida del pueblo de Boós, renunciando al reparto de dividendos, habla por sí solo de su grado de compromiso con la conservación del patrimonio medioambiental recibido de su mayores, así como con el desarrollo de la propia localidad de Boós", apuntan. La materialización de este evento es posible gracias al apoyo de la Junta de Castilla y León, quien desde el año 2003 viene colaborando activamente con la Asociación Forestal de Soria al objeto de lograr la recuperación y puesta en valor de este tipo de montes, que tan sólo en la provincia de soria alcanzan las 180.000 hectáreas. "La revitalización de estos montes, así como la difusión de su existencia, es así mismo una labor que apoya la Secretaría General para el Reto Demográfico del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de nuestro país", concluyen recordando que la recuperación de este monte genera múltiples beneficios para la sociedad: ambientales, al mejorar la biodiversidad del monte y reducir su riesgo de incendio; económicos, al permitir la movilización de recursos actualmente "dormidos" relacionados con la bioeconomía forestal (madera, leñas, pastos, micología, apicultura...); y sociales, al generar empleo y fortalecer los vínculos de la gente con su territorio y con su monte.