Colisionar con lo invisible

S.Ledesma
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Las cristaleras que rodean a las pistas de pádel son una trampa mortal para «las aves del entorno», algo que puede cambiar la biodiversidad; el mayor impacto se da en época de reproducción, según Seo BirdLife

Colisionar con lo invisible - Foto: E.G.M

Las pistas de pádel se han convertido en el frontón de los pueblos del siglo XXI. En la provincia de Soria es fácil encontrarlas en más de una veintena de municipios. También en los más pequeños, pues las corporaciones desean satisfacer la demanda de sus veraneantes. Pero estas instalaciones, que en algunos pueblos permanecen sin actividad varios meses al año, pueden contribuir a modificar la biodiversidad de la zona. Su superficie acristalada es una trampa mortal para las aves. Según indica la Unidad de Medio Ambiente de la Fiscalía General del Estado, «la mortandad de aves se produce en su mayor parte por el choque contra elementos acristalados, como las paredes de las pistas de pádel o las mamparas de protección acústica». En la provincia de Soria, como sucede en otras, contabilizar la mortalidad «es muy difícil porque suelen estar en pueblos y los cadáveres desaparecen» bien por carroñeros o porque los vecinos los retiran, según explica Juan Luis Hernández, coordinador del grupo local de Seo BirdLife en Soria. 

Para «evitar estas muertes», el órgano estatal propone aplicar el artículo 340 bis del Código Penal en materia de malos tratos animales. De esta manera, las administraciones competentes deberían «impulsar cuantas medidas fuesen procedentes en pro de la preservación de la fauna, así como adoptar las iniciativas que fuesen necesarias para evitar o disminuir estas colisiones». Pero esto no es tan sencillo. «Primero hay que demostrar que se produce esa mortandad y luego instar al propietario (Ayuntamiento o comunidad de vecinos) a tomar medidas», indica el coordinador de Seo BirdLife en Soria. Lo cierto es que «podría ser un delito porque son aves protegidas». «Habrá gente que piense 'son 30 pajaritos', pero es que a lo mejor te has cargado a la población de carboneros de una zona», advierte.

El coordinador del grupo local de Seo BirdLife en Soria destaca que los más afectados son los «pequeños paseriformes, pajaritos pequeños que viven en el entorno inmediato» de la pista de pádel. «El problema -menciona- es que al lado suele haber jardines y parques [por lo que hay avifauna cerca] y en los pueblos que todo es campo». En la provincia los más perjudicados, según indica Hernández, son el petirrojo, el carbonero, el pájaro carpintero, el martín pescador, el zorzal, así como el pájaro carpintero verde en la zona de Almazán. Durante las migraciones, detalla, también es posible que algunas aves colisionen contra estas estructuras, como la curruca. La mayor afección a la biodiversidad se daría «en época de reproducción». «Es un momento delicado porque no sólo muere el ave adulta sino también los pollos al no tener quién les alimente», aclara.  

«una muerte absurda». En los últimos años se va tomando conciencia de la situación y estas instalaciones deportivas incluyen  medidas anticolisión para las aves, aunque no siempre son efectivas «al no cubrir todo el acristalamiento, como las siluetas de pájaros» y la mortalidad de la avifauna continúe siendo algo habitual. «Si se piensa bien es una muerte absurda porque es perfectamente evitable. Es tan sencillo como colocar unos vinilos longitudinales o unos cuadraditos», indica Hernández para enumerar algunas instalaciones de la provincia que ya tienen estos sistemas, como Ágreda, Garray, Almazán o Blacos. «Ahora se están tomando medidas», indica, aunque todavía existen acristalamientos que pueden confundir a los pájaros, «los más problemáticos, en la capital porque no tienen medidas antichoque porque muchas son privadas», aunque, admite, «en una disposición urbana es más difícil que caigan». Los aerogeneradores son otras estructuras que también afectan a la avifauna soriana, principalmente a «aves más grandes y murciélagos», pero ésa es otra historia...