El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, pidió hoy en Burgos "restaurar los lazos interprovinciales" entre las distintas provincias que componen Castilla y León, para que haya un "mayor sentimiento de Comunidad", y recordó que Valladolid "no es el enemigo de Burgos, ni Burgos el enemigo de Valladolid". Así lo indicó durante la concentración que se celebró esta tarde en la Plaza de la Flora de Burgos, en apoyo a la familia del joven de 32 años, natural de Valladolid, Sergio Delgado, que falleció este fin de semana en la capital burgalesa por un presunto delito de odio.
La concentración, convocada por la Asociación Sociedad Civil Burgalesa (Socibur) tenía por objetivo condenar el suceso que tuvo lugar el pasado sábado y mostrar su apoyo a la familia y amigos del joven fallecido. Medio centenar de personas se concentró frente al lugar donde tuvieron lugar los hechos, se guardó un minuto de silencio en memoria de la víctima y se procedió a leer un manifiesto en representación de la sociedad burgalesa.
En declaraciones a los medios de comunicación, el vicepresidente autonómico, que estuvo acompañado del procurador por Burgos, Iñaki Sicilia, trasladó el pésame a la familia del fallecido y lamentó el suceso ocurrido en la capital burgalesa. "Estaba en el mejor momento de su vida, yéndose a la provincia de al lado, una provincia vecina y hermana", lamentó García-Gallardo, que expresó así su "condena más rotunda a la violencia de la extrema izquierda".
"Es algo que se veía venir. Todo el mundo lo sabe. Llevan años jugando a la ruleta rusa, con agresiones indiscriminadas, esparciendo su odio y su violencia, y lo ha tenido que pagar Sergio, lo cual es inaceptable", afirmó el vicepresidente de la Junta, que recordó las palabras expresadas por el presidente de Socibur durante la lectura del manifiesto, y señaló que Burgos es una "ciudad de acogida, de bienvenida".
"Como burgalés e hijo y nieto de burgaleses, esa gentuza no representa a Burgos. Han manchado su nombre de manera inevitable por este acto repugnante que ha acabado con el asesinado de Sergio", afirmó. Asimismo, a esperas de lo que determine la investigación judicial y policial, quiso condenar la "deriva que se ha ido viendo en la política española, con un especial impacto en Castilla y León".
Se refirió así al "odio irracional" frente a la provincia de Valladolid, y recordó que ni Valladolid es "enemiga" de Burgos, ni viceversa. "Es una irresponsabilidad muy grave que, durante décadas, se haya alimentado ese discurso de que lo que es bueno para Valladolid es malo para Burgos". Por ello, en su intervención ante los medios, el vicepresidente autonómico pidió un "acto responsabilidad y reflexión prudente y serena de por qué se ha llegado hasta este punto".
"Este no es un conflicto aislado, ni una tragedia que no se pudiera prevenir, esto es el desenlace fatal de años y años alimentando el odio frente a la provincia de Valladolid", lamentó García-Gallardo, que señaló que no ve que existan "motivos para que se ataque de esta manera". Afirmó así que es "absolutamente inaceptable" que una persona pueda sufrir una agresión violenta presuntamente "por el hecho de ser de Valladolid". "Esto merece una reacción de la sociedad", apuntó, a la vez que recordó que este tipo de acciones no "representan a la sociedad en su conjunto" ni a una "parte mayoritaria" de la misma.
"Los gobiernos, los representantes públicos, los diputados provinciales, los diputados autonómicos, los responsables locales, tienen que hacer una reflexión de cómo se puede reconducir una situación tan grave como esta en la que un presunto asesino acaba matando a una persona inocente por el hecho de ser de un lugar determinado", añadió al respecto. Recordó así que aún queda "mucho que reflexionar" y "habrá que fomentar y restaurar los lazos interprovinciales entre las distintas provincias de Castilla y León". Hizo alusión así a los lazos de Burgos con Valladolid, como los de León con Valladolid.
Concentración
La concentración, convocada por Socibur, contó con la presencia de dirigentes políticos tanto autonómicos como locales y provinciales, entre ellos la alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, el vicealcalde de la ciudad, Fernando Martínez-Acitores, así como varios concejales del Ayuntamiento burgalés.
Durante la misma, se guardó un minuto de silencio en memoria de la víctima, y posteriormente el presidente de Socibur, Julio Moreno, leyó un manifiesto, donde expresó su condena por el trágico suceso ocurrido en esa misma plaza hace solo unos días. Expresó así la solidaridad de la ciudad de Burgos con la familia y amigos de Sergio Delgado, así como su "total repulsa" por el suceso. "No hay explicación, la barbarie no tiene cabida alguna entre nosotros", lamentó.
"Burgos es una ciudad de acogida, de hermanamiento, de cruce de caminos, de vida, dignidad y abierta al mundo, de forma solidaria y pacífica", recordó durante la lectura del manifiesto, a la vez que denunció este suceso así como cualquier otro que "mancille" la historia de la ciudad. "No vamos a permitir que el desánimo, el horror, la violencia tengan cabida en esta gran ciudad. Recuperemos la nobleza, el valor de la vida, de los valores de convivencia y unión que Sergio tanto querría", añadió. Finalizó su intervención enviando un "cálido abrazo" a la familia del joven vallisoletano. El acto finalizó con la colocación de un ramo de flores frente al lugar donde tuvo lugar el suceso.