En la mañana de este lunes los viandantes que transitaban por el centro de Soria se han alarmado al caer cascotes de grandes dimensiones del edificio de la avenida de Navarra que se encuentra precintado y en el que los operarios están trabajando para mantener la seguridad al tiempo que instalan andamios. La casa está en pleno proceso de rehabilitación y es una de las que cuentan con protección especial del PGOU.

En esa zona, apenas se ha dejado un metro de acera para el paso de los peatones, lo que dificulta el tránsito en la avenida de Navarra, recientemente pavimentada dentro de las obras de peatonalización.