Soria ¡YA! se muestra profundamente decepcionada ante las propuestas que anunció ayer Pedro Sánchez en su investidura en la lucha contra la despoblación y que van a ser sus líneas de actuación de gobierno durante la presente legislatura. Para el movimiento ciudadano se confirma definitivamente que el reto demográfico, es decir la lucha contra la despoblación y el reequilibrio territorial, no es una de las prioridades en la agenda del nuevo Gobierno de España. "Ha anunciado seguir con recetas que no están funcionando, y la medida estrella, el acceso a servicios esenciales en 30 minutos, es parte de una propuesta más amplia que ha tomado prestada del Modelo de Desarrollo de los colectivos de la España Vaciada. No hay un plan integral y transversal para enfrentarse a uno de los problemas más grandes que tiene este país, no hay intención de llegar a un Pacto de Estado contra la despoblación. La ausencia de la voz de la España Vaciada en las Cortes Generales se nota", señalan desde el movimiento sorianista.
Por otro lado, Soria ¡YA! vuelve a dejar clara su postura ante las consecuencias que van a tener para Soria en particular, y la España vaciada en general, los pactos firmados por el PSOE con Sumar y los diferentes partidos nacionalistas e independentistas. "Estos acuerdos van a hacer más grande la brecha que existe entre territorios y sus ciudadanos. Se vuelve a favorecer, por intereses puramente partidistas, a unas comunidades olvidando a otras. De nuevo gana la insolidaridad interterritorial. No hay suficiente pastel para todos y la gran parte se vuelve a repartir entre los de siempre, los que más tienen, quedando para Soria, con suerte, las migajas ante el silencio cómplice de Luis Rey y Javier Antón, diputado y senador del PSOE de Soria, pero no por y para Soria", lamentan.
Para los sorianistas, la ley de amnistía ha restado trascendencia ante la ciudadanía a unos acuerdos económicos que seguirán ampliando la desigualdad y repercutiendo en la cohesión social, en la falta de oportunidades y en el desarrollo económico de la España Vaciada, de sus habitantes y empresas, manteniendo su condición de territorios de sacrificio con una importante merma de servicios, infraestructuras, comunicaciones, etc. de por sí muy deteriorados e influyendo negativamente en la vida de todas las personas que habitan estos territorios en los que se va a provocar y prorrogar un agravio comparativo intolerable y que es histórico.