El padre del delantero del Barcelona y de la selección española Lamine Yamal, Mounir Nasraoui, aseguró ayer que supo que su hijo «iba a ser una estrella» desde el mismo momento en el que nació.
«Yo supe lo de mi hijo cuando nació, sabía que iba a ser una estrella. El que es padre lo sabe y cualquier padre quiere que su hijo sea el mejor», afirmó desde el barrio de Rocafonda, situado en Mataró (Barcelona).
Nasraoui explicó que Lamine está «eufórico» con el pase de la selección española a la final de la Eurocopa. «Quiere ser el jugador más joven en ganar este torneo, como cualquier niño», añadió. El padre del atacante culé aseguró que, para él, su hijo es «el mejor en todo». «No solo en el fútbol, también en el amor y como persona. Es un niño y tiene una bendición de Dios, que es muy importante y hay que valorarla», comentó.
Nasraoui, que volará mañana a Alemania para presenciar la final del domingo contra Inglaterra, desveló que está viviendo los éxitos de su hijo y del combinado nacional «con felicidad y alegría» y remarcó sentirse «orgulloso de todos los jugadores». «Ojalá ganen la Eurocopa y seamos campeones», apostilló.
Finalmente, el padre de Yamal elogió a Rocafonda, el barrio que su hijo ha popularizado en la celebración de sus goles. «Este barrio es el mejor del mundo y de España, porque todos somos iguales y nos queremos por igual», aseveró con firmeza.