La nuevas obligaciones de la ley aumentan el abandono animal

S.L.O.
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Después de un trimestre en vigor, la normativa todavía genera dudas en la ciudadanía

La nuevas obligaciones de la ley aumentan el abandono animal. - Foto: Eugenio Gutiérrez

Poner todo el empeño, «como hemos venido haciendo, para ser útiles en materia de bienestar y salud animal, así como salud pública», siempre desde «el lado positivo» de las herramientas al alcance, en este caso en materia legislativa. Es lo que llevan haciendo desde el Colegio Oficial de Veterinarios de Soria «desde siempre» y ahora, de forma más específica, con la Ley de Bienestar Animal. Un trimestre después de su entrada en vigor todavía se está a la espera del desarrollo del reglamento que permita interpretarla de la forma correcta, porque hay vacíos que generan dudas. Por eso, la norma también tiene sus efectos colaterales y en las protectoras se aviva el temor a un mayor riesgo de abandono de animales por no querer asumir las nuevas obligaciones y gastos asociados, como en materia de castración y seguro canino. En Redención, por ejemplo, han recogido este verano «una cantidad increíble de cachorros» de perro, más de una cuarentena. La esterilización es obligatoria y los criadores deben tener un carné específico. El «miedo a una posible sanción» hace que los propietarios se desprendan de ellos.

La falta de información es una de las carencias más acuciantes de esta nueva normativa, «difícil de interpretar». Sin embargo, desde el Colegio Oficial de Veterinarios de Soria se encuentran «abiertos a todas las consultas que recibimos» y están capacitados bien para resolverlas o «dirigirlas a los organismos correspondientes», tanto a los propietarios como a las administraciones. Su presidente, Rafael Laguens, asegura que los profesionales «debemos adaptarnos a las circunstancias vigentes y usarlas de la mejor manera posibles» al efecto de ser de utilidad para la sociedad y para los animales.

Responsabilidad 
Laguens pone el acento en que uno de los principales objetivos que persigue la Ley de Bienestar Animal es «reducir y evitar el abandono de animales». Algo que le parece lo correcto «en una sociedad del siglo XXI», y «no sólo por el sufrimiento animal, sino por los riesgos sanitarios y molestias» que puede conllevar un animal abandonado en la vía pública.


Al tiempo, destaca que la normativa incluye algo importante que contribuye a poner freno a deshacerse de una mascota con impunidad: «La educación». «Está claro que tener un animal conlleva unas responsabilidades, se debe ser consciente de que no es un capricho ni un juguete ni una cosa. Es un ser vivo. Por eso es importante contar con educación y formación para tener un animal, saber qué necesidades tiene», explica el presidente del Colegio Oficial de Veterinarios de Soria. Para Laguens ambos son aspectos «positivos» que hay que abordar y desde el colectivo profesional están inmersos en ello. Asimismo, «dentro de nuestra medida de organismo provincial y en la búsqueda de todo lo bueno de la normativa», también se muestran dispuestos a «ayudar a mejorar la propia ley».

Resquicios

El abandono, que es precisamente algo que intenta evitar la nueva legislación, no es algo que se aborde de forma tan sencilla, tal y como indican desde Redención. «La Ley de Bienestar Animal ha sido algo positivo, porque protege, pero tiene algunos resquicios para poder escapar. Quienes van a seguir teniendo mal a sus animales lo van a seguir haciendo», explica su presidenta, María Poza. Otra cosa será cuando se calculen las sanciones, aunque ya hay personas que ante la duda, dejan a sus animales abandonados.


En la protectora el mayor número de casos se sigue dando en «animales mayores o con alguna enfermedad» porque sus propietarios ya no quieren hacerse cargo de ellos, además de «perros de caza por fin de temporada o porque la persona ya no va a cazar», además de cachorros de camadas no deseadas.