El Numancia se encuentra inmerso en pleno mercado de invierno. Los rojillos ya han realizado dos incorporaciones: Íñigo Alayeto y Christian Delgado. Al frente de esas operaciones está Alejandro Huerta. El director deportivo del club cuenta ahora a El Día de Soria sus sensaciones tras asumir un cargo que este verano era totalmente nuevo para él.
Queda un partido para el fin de la primera vuelta. ¿Qué balance hace?
A nivel deportivo creo que hemos conseguido, en parte, el objetivo. Somos un equipo que compite, que transmite y que está posicionado para el objetivo del ascenso.
¿A nivel personal cómo ha visto su trabajo?
En lo personal he intentado realizar todas las competencias en una situación que era nueva para mí. Quizá el puesto de entrenador es corto plazo y esto es más a medio plazo, pero estoy contento porque me siento valorado dentro del club.
Habla de medio plazo, pero todo hace indicar que solo vale ascender.
Ese mensaje es el que intento dar. El rol del director deportivo debe ir más allá del primer equipo, pero el Numancia debe estar por encima de Segunda Federación. Tenemos que buscar inmediatez y al menos subir una categoría.
¿Es difícil el cargo de director deportivo?
Sí que es complicado. Al final esto es fútbol profesional y el nivel de exigencia es alto para todos. Para un director deportivo es mucho trabajo en la sombra, sin horarios, muchos kilómetros en carretera. Siempre que apareces es para tomar decisiones complejas, pero el Numancia me ha puesto todos los medios para llevarlo de la mejor manera posible.
Aunque casi con la mitad de presupuesto de hace dos temporadas.
Esas cifras no me corresponden porque no estaba en el club, pero yo intento que no sea una excusa. Es cierto que vas al mercado con limitaciones presupuestarias, pero tenemos otros recursos. Tenemos una cosa clara: que la premisa sea que quieran estar aquí. Los que viene ponen mucho de su parte para estar. Tenemos que intentar valer el nombre de la entidad y los recursos
¿Se han llevado muchas respuestas negativas?
Te diría que no han sido tantos noes. Los ha habido, pero dentro de esa realidad han sido más los síes. Dentro de ser realistas y de saber hasta dónde podemos llegar, hemos podido hacer una plantilla con jugadores que han venido de la mano del míster que eran prioritarios para el estilo de juego que demandan. También tenemos jugadores que han vivido experiencias exitosas aquí como Bonilla, Lupu y Diamanka.
Hablemos de Christian Delgado. Llega del Córdoba sin jugar nada este año.
Con Christian ya estuvimos cerca de llegar a un entendimiento en verano, es un jugador que conocemos, que conoce el cuerpo técnico y es una petición de Javi Moreno desde el verano. Tenía competencia en Córdoba y optar por una cesión indica que el Córdoba le da importancia.
Íñigo Alayeto no es sub-23, ha sido toda una sorpresa.
Alayeto es una de esas oportunidades que no podíamos dejar pasar y que por distintos motivos no ha tenido continuidad en el último tramo de liga en el Sestao. Nos da experiencia en el frente de ataque y esperamos que pueda ser diferencial.
Con esta incorporación debían dar de baja a un jugador de la plantilla y ese ha sido David Sanz
Ninguno de los que estamos en el club somos tan importantes como el club y a veces hay que tomar decisiones y habrá una salida. Tenemos que tomar las decisiones más acertadas para ascender. Nos gusta cuidar lo personal, pero a veces el fútbol implica decidir. Hemos decidido que David Sanz salga cedido.
¿Están los dueños del club implicados al 100% con el Numancia?
Desde que he llegado siempre me han transmitido lo mismo: van a apoyar al club, van a poner los medios dentro de las posibilidades para subir categorías y no tengo ningún tipo de duda que está siendo así. No tengo ninguna queja y desde mi punto de vista sí están implicados.