Era un partido que debía definir si el Numancia mostraba de verdad su candidatura al liderato y al ascenso directo, y los de Javi Moreno han respondido con creces. Los rojillos han pasado por encima de un Getafe B que se ha visto totalmente superado ante un equipo soriano que ha mostrado su mejor versión gracias a los goles de Carlos González, Alain Ribeiro y Lupu.
Carlos González abrió el marcador tras recibir un balón desde el perfil derecho y ganar el área rival a pesar de la presión de dos defensores locales. El canario ganó ese duelo y también el mano a mano con Josele, al que batió con un buen disparo, colocado y raso sobre el perfil derecho del meta azulón.
Se acababa de superar la primera media hora de partido y el Numancia obtenía el justo premio a una fuerte presión alta en la salida de balón del cuadro local y a su concentración en los duelos individuales con los que se emparejó la línea de cuatro defensas rojillos con los cuatro atacantes del filial getafense.
Tanto Óscar De Frutos como Diego Royo, Soler y Bonilla superaron en los duelos individuales a sus pares y la línea media numantina también estuvo poderosa y concentrada para superar líneas y rivales, por lo que cada recuperación o cada robo numantino permitían lanzar la transición y generar ocasiones al espacio y la espalda rival.
Si bueno fue el primer gol de Carlos González, el segundo fue todavía mejor. Una nueva recuperación numantina permitió a Rubén Sanchidrián avanzar por la banda derecha y ceder a Alain Ribeiro que tras recibir en la frontal y generarse el espacio disparó el balón a la misma escuadra de Josele para convertir el 0-2 para su equipo.
El gol abría una brecha importante en el marcador a poco minutos del descanso, que sin embargo acabó con mala noticia para el Numancia, pues Carlos González pidió el cambio tras una carrera tras sentir una molestias musculares en una de sus piernas.
El hueco de Carlos González lo ocupó Lupu, que descanso mediante, acabó siendo protagonista nada más iniciarse la segunda mitad. El delantero rojillo hizo el 0-3 en el primer minuto del segundo acto. Necesitó dos disparos, pues el primero de ellos lo consiguió repeler Josele, pero el atacante numantino recogió el rechazo y en su segundo tiro clavó el balón en la escuadra para finiquitar el partido y evitar cualquier intento de reacción local.
Pese al 0-3, los locales no se fueron del partido y buscaron siempre el tanto que les permitiese meterse en el encuentro. No lo consiguieron gracias a que los rojillos mantuvieron la concentración en todo momento y estuvieron serios y expeditivos en cada acción. Dorronsoro apareció cuando fue necesario para mantener la portería a cero y el cuadro numantino pudo incluso ampliar el marcador, con un cabezazo de Lupu que se estrelló en el larguero o dos clarísimas ocasiones de Alayeto y Tamayo que no consiguieron finalizar.
Javi Moreno pudo hasta gestionar los minutos de varios de sus jugadores, completando todos los cambios a un cuarto de hora para el final de un partido en el que se pudo ver al mejor Numancia en el mejor momento. Quedan ocho partidos, que siguen siendo ocho finales, pero el Numancia ha vuelto.