La Agencia de Protección Civil y Emergencias ha declarado este jueves el fin de la alerta por fuertes vientos en Castilla y León a causa de la borrasca 'Kirk', que dejó ocho heridos y más de 1.081 llamadas relacionadas con incidencias que derivaron en la gestión de 721 incidentes. La alerta se activó el martes 8 de octubre a partir de las 14.00 horas y se ha mantenido hasta este jueves, 10 de octubre, a las 10.00 horas, con vientos previstos de hasta 120 kilómetros por hora, según ha informado la Junta en un comunicado recogido por Europa Press. En este contexto, el Centro de Emergencias 112 de Castilla y León ha recibido 1.081 llamadas relacionadas con incidencias por las rachas fuertes de viento durante la alerta declarada, que derivaron en la gestión de 721 incidentes.
Para su resolución, se avisó a los distintos servicios de emergencias competentes, como son los servicios de extinción de incendios y salvamento, Policías Locales o Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. También se informó al Centro Coordinador de Emergencias de la Junta de Castilla y León, ante la posibilidad de tener que emplearse medios suplementarios o adoptar medidas extraordinarias de protección a la población. Las horas de mayor carga de trabajo para este centro fueron entre las 12.00 y las 13.00 horas del miércoles, cuando el 112 atendió 179 llamadas relacionadas con el viento, mientras en los siguientes sesenta minutos, de 13.00 a 14.00 horas, fueron 152 llamadas.
Asimismo, cuatro personas resultaron heridas tras ser golpeadas por ramas de árboles en Burgos y Soria, otra más tras caerse mientras podaba una rama en Mironcillo (Ávila) y una sexta en Fuente El Olmo de Fuentidueña (Segovia) tras ser golpeada por una puerta que se desprendió a causa del viento. Además, en un accidente de tráfico en la autovía A-6 en Medina del Campo (Valladolid) también se atendió a dos personas heridas, siniestro que tuvo su origen en una polvareda generada por las rachas de viento.