Las constructoras dan la espalda a 88 obras públicas

SPC
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La administración local fue la más afectada por los concursos desiertos entre enero y julio, periodo en el que la licitación se disparó casi un 14 por ciento respecto al año pasado

Imagen de la obra pública en una carretera de la provincia de Burgos. - Foto: Miguel Ángel Valdivielso

Los coletazos de la inflación siguen dejándose notar en la obra pública de Castilla y León. Un total de 88 proyectos no encontraron empresa que los ejecutara al quedar desierta su licitación en los siete primeros meses del año. Ninguna constructora pujó por ellos en el concurso, por lo que hasta 26,5 millones de euros en inversiones se quedaron en el cajón de las administraciones esperando una nueva oportunidad.

Los problemas de contratación de las infraestructuras se mantienen en la Comunidad, de acuerdo a los datos que maneja la Cámara de Contratistas, que de enero a julio detectó cinco concursos desiertos de la Administración central, frente a los 14 de la autonómica y los 69 de la local, la que está registrando más dificultades para encargar sus obras este año, con bastante diferencia.

Los contratistas consideran que las licitaciones desiertas, una situación que se ha producido siempre pero en menor medida, responden a que los presupuestos de algunas obras públicas están desfasados y no se ajustan a los precios de mercados, que se han visto incrementados por el encarecimiento de las materias primas o los costes energéticos.

Las constructoras dan la espalda a 88 obras públicasLas constructoras dan la espalda a 88 obras públicas - Foto: FS ICALOtro de los factores que explican el volumen elevado de obras desiertas es que las constructores no se enfrentan a un periodo de escasez en las inversiones públicas. Al contrario, las tres administraciones licitaron durante los siete primeros meses 1.206 obras, que sumaron 1.636,7 millones, lo que supone un 13,9 por ciento más que en 2023.

De momento, la Cámara de Contratistas ha detectado que el Estado ha visto como cinco licitaciones se quedaban desiertas en Castilla y León con 1,6 millones, de los que el más relevante es una obra de Tragsa para la restauración ambiental de una explotación minera en Torre del Bierzo y Villagatón (León), pues rozaba los 800.000 euros.

En el caso de la Junta, suma 14 actuaciones sin ofertas, por lo que ha tenido que anular estas licitaciones que suman más de 14,79 millones. La actuación paralizada de mayor importe es una licitación por algo más de seis millones que publicó Somacyl, dependiente de la Junta, para construir una promoción de viviendas en alquiler, en modalidad colaborativa, en Valladolid.

Más de 10,1 millones se quedaron sin adjudicatario por parte de ayuntamientos y diputaciones. De los 69 concursos fallidos por no recibir ninguna propuesta, destaca uno de primeros de año de algo más de un millón para la peatonalización de varias calles de Palencia, así como otro de más de 630.000 euros en Salamanca, según informa Ical.

No obstante, la evolución de 2024 se asemeja a la de 2023, cuando la Cámara de Contratistas contabilizó 170 obras desiertas en Castilla y León, con una inversión acumulada de 47,93 millones. Por un lado, la Administración central y la autonómica tuvieron que anular entonces 21 concursos cada una, pero con un presupuesto diferente, porque en el primer caso fue de 8,28 millones y en el segundo de 6,26.

Más inversión, de momento.

Las administraciones licitaron de enero a julio obras por 1.637 millones en Castilla y León, lo que supone un 13,9 por ciento más respecto a 2023. La central acumula 928 millones, lo que representa el 57 por ciento, tras aumentar un 29 por ciento respecto al pasado año.

En el caso de la Junta, sumó obras por 462 millones, lo que representa el 28 por ciento de la licitación en la Comunidad. En su caso, sus inversiones experimentaron una variación positiva del 8,4 por ciento. En el caso de las entidades locales, aportaron el 15 por ciento, con 247 millones (-15,4 por ciento).

Por provincias, la inversión en obra pública creció en seis de ellas y disminuyó en tres. En Soria se registró un descenso notable del 52,2 por ciento; en Palencia, del 44,5, y en Zamora, del 34,7 por ciento. Por el contrario, casi se duplicó la licitación en Valladolid (94,7 por ciento) y creció un 75,7 por ciento en Segovia y un 60,7 por ciento en León.