El cambio de tendencia hacia el repostaje con gasolinas (95 y 98) frente al diésel (gasóleo A) aceleró durante el primer trimestre del año 2024 en consonancia a la evolución del mercado de vehículos. El consumo de sin plomo 95 y de 98 creció a ritmos de dos dígitos mientras que el de diésel mermó un 2,7 por ciento.
La Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores) constata que el repostaje de gasolina 95 alcanzó hasta marzo de 2024, las 68.629 toneladas en la Comunidad, que suponen una subida del 13,1 por ciento en relación a 2023. Asimismo, en gasolina 98, el consumo se situó en 3.018 toneladas, un 13,3 por ciento más que en el mismo periodo del ejercicio anterior, informa Ical.
Cores revela, no obstante, que el consumo de gasóleo A sigue siendo mayoritario para transporte, con 373.261 toneladas entre enero y marzo, con una merma del 2,7 por ciento. En este sentido, el descenso en el consumo de diésel, provocó una bajada global del repostaje en Castilla y León en el primer trimestre del año del 0,5 por ciento, hasta las 444.907 toneladas, cuando se eliminaron las bonificaciones a los transportistas profesionales y se ralentizó la actividad económica.
Un análisis territorial revela que el consumo de carburantes para transporte se redujo en dos provincias de Castilla y León, Burgos y Valladolid, y se elevó en el resto del territorio autonómico. En concreto, en la provincia burgalesa alcanzó las 68.466 toneladas, con una merma del 10,9 por ciento; y en la vallisoletana supuso 71.710, un 4,8 por ciento menos. Por el contrario, en Salamanca el repostaje se situó en las 62.224 toneladas, con un incremento del 5,2 por ciento, y en Palencia, en las 43.712 y un avance del cinco por ciento. Aumentó también el consumo de carburante entre enero y marzo un 3,5 por ciento en Zamora, con 48.429 toneladas; un 3,2 por ciento en Ávila, con 24.153; y un 2,7 por ciento, en Segovia, con 30.225. Por último, se elevó en León un 1,6 por ciento, hasta las 76.686 toneladas; y en Soria, un 1,5 por ciento, con 19.303.
El repostaje de gasóleo A bajó en Burgos (55.921 toneladas), un 15,7 por ciento; en Valladolid (57.480), un 8,6 por ciento; en Soria (16.217), un 1,8 por ciento; y en León (63.572), un 0,1 por ciento. Por el contrario, se elevó en Salamanca (53.943 toneladas), un 5,6 por ciento; en en Palencia (39.283), un 4,2 por ciento; en Zamora (43.350), un 2,5 por ciento; en Ávila (19.282), un 1,3 por ciento; y en Segovia (24.175), un 0,2 por ciento.
En cuanto a la gasolina 95, aumento su consumo en todas las provincias de Castilla y León, en Soria (2.941 toneladas), un 24 por ciento; en Burgos (12.005), un 19,8 por ciento; en Valladolid (13.685), un 14,8 por ciento; en Segovia (5.757), un 14,3 por ciento; en Zamora (4.837), un 13,8 por ciento; en Palencia (4.248), un 12,9 por ciento; en Ávila (4.717), un 12 por ciento; en León (12.541), un 10,5 por ciento; y en Salamanca (7.898), un 1,6 por ciento.
Para finalizar, en gasolina 98, el repostaje bajó solamente en Ávila (155 toneladas), un 0,8 por ciento, y aumentó en el resto. En concreto, creció en Salamanca (384 toneladas), un 23,6 por ciento; en León (573), un 19,7 por ciento; en Palencia (182), un 17,6 por ciento; en Burgos (540), un 14,8 por ciento; en Segovia (253), un 11,4 por ciento; en Zamora (242), un 8,2 por ciento; en Soria (145), un 7,4 por ciento, y en Valladolid (545), un 7,2 por ciento.