Castilla y León ya cumple los requisitos aprobados por el Ministerio de Sanidad el pasado miércoles para retirar la obligatoriedad de las mascarillas en los centros sanitarios y hospitalarios. Los datos de la Red Centinela Sanitaria de Castilla y León reflejan que la Comunidad ha registrado ya dos semanas consecutivas de descenso de la tasa de infecciones respiratorias agudas, por lo que se abre la puerta a anular la orden ministerial una semana después de su entrada en vigor. Ahora la decisión está en el tejado de la Consejería de Sanidad, que podría optar por mantener la obligatoriedad de las mascarillas en los centros sanitarios, o, proceder a su retirada. No obstante, fuentes de la propia Consejería reconocen a este periódico que todavía no se ha tomado una decisión al respecto.

Todo ello después de que Castilla y León haya contabilidad en la semana del 8 al 14 de enero ese segundo descenso consecutivo de la tasa de infecciones respiratorias, con 1.389 casos por cada 100.000 habitantes frente a los 1.477 de la anterior y los 1.508 de la última de diciembre del pasado año, cuando se alcanzó el pico máximo en la Comunidad.

Los datos de la Red Centinela reflejan que la tasa descendió la pasada semana un 6,33 por ciento –88 casos menos–, hasta los 1.389. Además, los síndromes gripales se han estabilizado en torno al umbral de intensidad media, con una tasa de 236 casos por 100.000 habitantes, frente a los 230 de la semana pasada, y la covid-19 sigue descendiendo, con 66 casos, frente a los 79. Precisamente, este fin de semana se produjo en la Comunidad un barrido masivo para vacunar en los centros de salud sin cita previa, para tratar de doblegar finalmente la crisis de las infecciones respiratorias.

En las muestras centinelas, la positividad al SARS-Cov-2 y al virus respiratorio sincitial desciende a valores por debajo del ocho por ciento, aunque la circulación de los virus de la gripe sigue en porcentajes altos, con predominio del tipo A, tanto del H1 como del H3. Durante esta temporada 2023-2024, la Consejería de Sanidad informó de que la gripe ha afectado, sobre todo, al grupo pediátrico y al de 25 a 64 años, mientras la covid-19 se ha centrado en los mayores de 65 años, y las bronquitis y bronquiolitis en los menores de hasta cuatro años y a los mayores de 75 años.

La Junta acató el pasado 10 de enero imponer el uso obligatorio de la mascarilla en los centros sanitarios, aunque puso en duda del rigor científico con que se había tomado esta medida. La medida se aplicó al recibir ese día poco después de las 19 horas la orden comunicada del Ministerio de Sanidad de actuaciones coordinadas, que se hizo efectiva en ese momento. 

Finalmente, la instrucción del Ministerio permite a la Junta retirar el uso obligatorio de la mascarilla si se acumulan dos semanas consecutivas con descensos de la incidencia acumulada de las infecciones respiratorias aguas, si bien podrá acordar su continuidad si lo considera oportuno. Esta condición ya se cumple en Castilla y León, de acuerdo a los datos de la Red Centinela, correspondientes al periodo del 8 al 14 de enero, publicados este martes.