El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, ha afirmado este martes que el Gobierno sigue "con preocupación máxima" la extensión del conflicto en Oriente Medio, que está "llevando a la región al borde de una guerra abierta", y ha urgido a todos los españoles que se encuentran en Líbano a abandonar el país.
Albares ha comparecido en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros para presentar un informe sobre la situación en la zona y ha explicado que hay un plan de evacuación listo para el momento en que sea necesario activarlo, en coordinación con el Ministerio de Defensa, aunque no ha querido dar detalles por motivos de seguridad.
Por el momento hay todavía una compañía comercial que opera tres vuelos semanales a Madrid y también hay salida marítima con destino a Turquía, Chipre y Grecia, ha apuntado Albares, quien ha recomendado encarecidamente salir del país, aunque sea temporalmente.
La colonia española controlada por la Embajada en Beirut, que está actualizando direcciones y teléfonos de contacto por si precisa su localización urgente, está compuesta por algo más de un millar de personas, incluyendo nacionales españoles, dobles nacionalidades, familiares de españoles y personas en tránsito, entre ellas una decena de periodistas.
No hay constancia de ninguna víctima española en Líbano.
A esa colonia se suman el contingente de 669 militares españoles desplegados en Líbano bajo bandera de Naciones Unidas (FINUL), cuya labor ha considerado "fundamental" para el mantenimiento de la paz.
Según el informe de Exteriores, los bombardeos israelíes en Líbano han causado ya 1.600 víctimas mortales, además de miles de heridos y más de un millón de desplazados, "un conflicto -ha dicho Albares- insoportable para la más elemental humanidad que debe de cesar cuanto antes".
"España no se va a resignar a que la guerra sea la forma normal de relacionarse entre los pueblos de Oriente Medio", ha manifestado el ministro, quien ha vuelto a apostar por la celebración de una conferencia internacional de paz en Madrid que implemente la solución de dos estados con Israel y Palestina conviviendo en paz.
Albares ha recordado que España ha condenado con firmeza el lanzamiento de misiles de Hizbulá sobre Israel, como condenó los atentados de Hamás, pero ha insistido en que los recientes ataques de Israel sobre Líbano han causado en unos días más víctimas que en los últimos treinta años.
"La invasión terrestre en Líbano debe detenerse" y "la espiral de violencia debe cesar", ha subrayado en referencia a la extensión del conflicto a países como Yemen e Irak que acerca el riesgo de una "guerra abierta".
El Gobierno está en contacto con diversos actores de la región para pedir "la máxima responsabilidad y contención para evitar el peor de los escenarios" y abogar por la aplicación de la resolución 1.701 del Consejo de Naciones Unidas, que exige un alto el fuego permanente entre Líbano e Israel.
Ante la situación humanitaria en Líbano, Albares ha explicado que en las últimas semanas se ha aportado de urgencia un millón de euros a la Federación de la Cruz Roja y la Media Luna Roja.
Se está preparando además un envío urgente de medicinas a través de la Organización Mundial de la Salud por valor de 15.000 euros; y se apoyará con otros 200.000 euros los equipos médicos de emergencia activados por ese organismo.
El director de la Agencia Española de Cooperación Internacional tiene previsto reunirse este martes con las ONG con presencia en Líbano para estudiar cómo canalizar recursos.
Con todas las miradas en ese país, Albares ha pedido no olvidar la situación en Gaza y Cisjordania. "Hay que parar de una vez las armas y dejar espacio para la diplomacia".