Los servicios de Inteligencia de Reino Unido han asegurado este jueves que el buque de asalto anfibio ruso Novocherkask quedó "totalmente destruido" por el ataque lanzado el martes por las Fuerzas Armadas de Ucrania contra el puerto de Feodosia, situado en la península de Crimea.
"Pruebas de fuentes abiertas sugieren que es muy probable que el buque portara una carga explosiva cuando fue alcanzado, lo que provocó una gran explosión secundaria", han dicho, según un comunicado publicado por el Ministerio de Defensa británico a través de su cuenta en la red social X.
Así, han recalcado que, de esta forma, ascienden a tres los buques de asalto anfibio que ha perdido Rusia desde el inicio de la invasión de Ucrania, desatada en febrero de 2022 por orden del presidente ruso, Vladimir Putin. Los otros dos buques destruidos son el Saratov y el Minsk.
"Rusia probablemente planeaba usar sus buques de asalto anfibio pasa llevar a cabo asaltos anfibios significativos durante la invasión y duplicó el número de buques de este tipo en el mar Negro durante los preparativos de la guerra", han sostenido los servicios de Inteligencia británicos.
En este sentido, han explicado que "ante la continuación de la guerra, los barcos han sido usados más generalmente para dar apoyo logístico, un papel significativo porque aumenta la vital y relativamente frágil conexión por carretera y ferrocarril en el puente de Crimea, que conecta Crimea con Rusia".
Por su parte, el ministro de Defensa británico, Grant Shapps, ha subrayado que "Rusia engañó cuando dijo que el buque Novocherkask de Putin sólo había resultado dañado. "Claramente ha quedado completamente destruido", ha agregado.
"Es crucial que en 2024 el mundo civilizado siga apoyando a Ucrania en esta batalla, definitoria de una época, que se está disputando en Europa", ha indicado el ministro en un breve mensaje publicado en X a raíz del informe de los servicios de Inteligencia británicos.
El Ministerio de Defensa ruso señaló el martes que el buque había sufrido "daños" durante un ataque de Ucrania y afirmó que "los sistemas de defensa aérea destruyeron dos aviones tácticos enemigos Su-24" durante el incidente, extremo que fue negado posteriormente por el portavoz de la Fuerza Aérea ucraniana, Yuri Ignat.
La península de Crimea, y especialmente Sebastopol, donde se encuentra una base de la Armada rusa, es un objetivo destacado de las fuerzas ucranianas, que emplean aviones no tripulados y misiles para alcanzar a objetivos rusos. El territorio fue anexionado en 2014, una medida no reconocida por la comunidad internacional.