El Gobierno estadounidense envió una carta a Israel en la que advierte que, si no mejora la situación humanitaria en Gaza incrementando la entrada de ayuda durante el próximo mes, podría violar las normas de EE.UU. sobre asistencia militar extranjera y perder la que recibe.
La Casa Blanca confirmó este martes que, como habían reportado algunos medios, los secretarios de Estado, Antony Blinken, y de Defensa, Lloyd Austin, enviaron una carta a sus homólogos, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, y el de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer.
Estados Unidos expresó en la carta su profunda preocupación ya que la cantidad de ayuda entregada a la Franja de Gaza ha caído más del 50 % y la suministrada en septiembre "fue la más baja de cualquier mes durante el año pasado".
Por tanto, exigió "acciones urgentes y sostenidas" para revertir la situación y advirtió que los departamentos de Estado y Defensa de EE.UU., según la ley estadounidense, "deben evaluar continuamente" el cumplimiento por parte de Israel de las garantías que dio a principios de este año de que no restringiría la ayuda.
Según EE.UU., Israel debe permitir que al menos 350 camiones al día entren a Gaza a través de los cuatro cruces principales, abrir un quinto cruce e implementar durante el próximo mes pausas humanitarias en Gaza, según sea necesario. Israel también debe tomar medidas para garantizar que los corredores de las fuerzas armadas jordanas funcionen "a plena y continua capacidad".
Blinken y Austin afirmaron estar preocupados por las recientes acciones del Gobierno israelí, entre ellas la suspensión de las importaciones comerciales y la negación o impedimento de casi el 90 % de los movimientos humanitarios entre el norte y el sur de Gaza en septiembre.
La carta está en línea con las comunicaciones que el presidente estadounidense, Joe Biden, ya ha tenido con el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, con el que conversó el pasado miércoles y al que pidió permitir la entrada de ayuda en Gaza a través de un corredor con Jordania.
Según explicó John Kirby, uno de los portavoces de la Casa Blanca, Biden y su equipo están "muy preocupados" por la poca cantidad de ayuda que ha entrado en Gaza en las últimas semanas y, por eso, han decidido enviar esa carta a las autoridades israelíes.
Kirby explicó que existe una "profunda sensación de urgencia" sobre la necesidad de que entre ayuda humanitaria cuanto antes en el enclave palestino.
Según explicó en otra rueda de prensa la subportavoz del Pentágono, Sabrina Singh, la carta que fue filtrada a medios no debería haberse hecho pública, ya que el objetivo era que el intercambio fuera privado.
La Casa Blanca no ha especificado por qué se ha elegido dar a Israel un plazo de 30 días para permitir que entre ayuda en Gaza, un periodo que podría ser mortal para las miles de personas en el norte del enclave que no han podido acceder a ningún tipo de ayuda desde que empezara un cerco militar hace 11 días.
La ONU ha advertido que la ayuda que entra a Gaza está en su nivel más bajo en meses.
Según el sitio web de la ONU que rastrea las entregas, unos 80 camiones con ayuda han entrado por los cruces en el norte de Gaza desde el 1 de octubre, en comparación con los 60 que entraban de manera diaria.
El COGAT, el organismo militar israelí que gestiona los asuntos civiles en los territorios palestinos ocupados, ha negado que los cruces hacia el norte hayan sido cerrados.