Todo un colegio ha dicho "gracias", "te queremos". El centro educativo Nuestra Señora del Pilar, Escolapios tributó hoy viernes un emotivo homenaje a uno de sus profesores más carismáticos, Manolo Olave Lumbreras, que, tras toda una vida ligado al colegio, primero como alumno y después como docente del mismo, se jubila. Han pasado 54 años desde que Olave Lumbreras pisó por primera vez las aulas de Escolapios, con sólo cuatro añitos. Allí continuó hasta los 17, momento en el que se trasladó a la ciudad de Zaragoza para estudiar la carrera de Ciencias Físicas. Sólo fue un punto y seguido, porque, nada más terminar sus estudios, en el año 1982, se incorporó como profesor al centro aunque tuvo que hacer un breve paréntesis en la docencia para cumplir con el servicio militar vigente aún en aquella época. Desde el curso académico 1984-1985 y hasta la actualidad ha ocupado todos los cargos que tiene el organigrama del colegio Escolapios: director titular, director académico, coordinador de secundaria, de bachillerato y los últimos años, coordinador de pastoral, faceta a la que está muy unido.

Desde el año 2000, ha acompañado a los alumnos de Bachillerato a Roma, convirtiéndose en un guía excepcional de la ciudad y un gran conocedor de la vida y obra de San José de Calasanz. Inspirándose en él, destacan en el Colegio Escolapios, intenta transmitir a los que le rodean los valores del santo fundador de la Escuelas Pías. 

Agradecidos por tantos años de esfuerzo y dedicación, todos los alumnos del centro y sus compañeros del claustro de profesores le homenajearon saliendo al pasillo para aplaudir a su paso y dejar claro que: "Te queremos, Manolo".