El presidente, Benito Serrano, ha destacado que estos centros siguen cumpliendo el objetivo con el que se creó: ayudar a las mujeres y a los hombres, a conciliar la vida familiar y laboral en el medio rural, dando un servicio de primer nivel a todas las familias ubicadas en los pueblos, sin que suponga una carga económica para los padres.
Este convenio incluye a los ayuntamientos de Ágreda, Almarza, Arcos de Jalón, Berlanga de Duero, Duruelo de la Sierra, Garray, Langa de Duero, Navaleno, Medinaceli, San Pedro Manrique, San Esteban de Gormaz, Vinuesa, Almazán, Covaleda, Ólvega, El Burgo de Osma, San Leonardo de Yagüe y Golmayo.
Este es el primer año que se crea esta ayuda lineal para todos los ayuntamientos, ya que antes se colaboraba con gastos de otro tipo, y no se descarta para próximas anualidades ir ajustando la ayuda a los municipios, en función de las necesidades que cada pueblo presenta para mantener abiertas sus guarderías.
La Diputación provincial aporta en total 126.000 euros, en concreto colabora con 7.000 euros a cada uno de estos 18 ayuntamiento que son titulares de centros de educación infantil y de Crecemos, incluidos en el Registro creado para este fin en la Comunidad Autónoma.
La Junta de Castilla y León se hace cargo de las matrículas de los alumnos de 0 a 3 años, siendo una educación gratuita para las familias, pero esta línea sigue teniendo sentido, ha destacado Benito Serrano, ya que la Diputación provincial aporta dinero para colaborar con los ayuntamientos en los gastos que ocasiona mantener abiertos estos centros.
La Diputación provincial de Soria fue pionera en la región con la puesta en marcha del proyecto Alejandra que comenzó a funcionar en mayo de 2002, hace 22 años. Fue el modelo que siguió la Junta de Castilla y León a la hora de crear el programa Crecemos en 2006.