César Millán

César Millán


¿Elecciones europeas?

08/06/2024

Aunque en muchos aspectos no lo parezca, este domingo los sorianos, como el resto de los españoles y los europeos pertenecientes a la Unión Europea, estamos llamados a unas elecciones en las que nos jugamos el futuro de los próximos años. Sí, aunque para muchos se haya convertido en un debate local y partidista, en el que las figuras de los líderes nacionales tengan más fuerza y presencia que los representantes de sus partidos (seguro que tenemos que hacer un notable esfuerzo para lograr poner nombre y rostro a quienes lideran cada una de las candidaturas, salvo aquellas que se han significado de manera incómoda). Hasta tal punto que muchos de los votantes tenemos la sensación, por desgracia muy cercana a la realidad, de que lo único que se pretende es minar la credibilidad o la fuerza del rival, de atacar al contrario con todas las armas posibles, a pesar de que muchas de ellas rocen lo particular.
Seguro que si se hace una encuesta para preguntar por el conocimiento de los programas de los partidos europeos cuanto menos arqueamos las cejas en señal de confusión. Sí, claro que a grandes rasgos conocemos por dónde tiran cada una de las formaciones europeas, el nivel de implicación en asuntos sociales, la importancia dada a la propia Unión Europea, la política de inmigración y un largo etcétera, pero poco más. Es más fácil hablar de los demás, sobre todo de sus 'errores' o deslices, que mostrar a quien quiera escuchar los puntos esenciales de su ideario.
Y es que no se nos olvide, el sentimiento europeo, en la mayor parte de los casos se ha convertido en una ventaja a la hora de desplazarnos, de manejar la misma moneda y, sobre todo, el saber que las ayudas europeas llegan a nuestro entorno y podemos aprovecharnos de ellas. Incluso es más que probable que muchos de los que se consideran 'euroescépticos' se echarían las manos a la cabeza si desapareciesen esas ayudas que parecen el 'maná' capaz de arreglar todos los problemas nacionales.
Eso sí, hay un aspecto que  cada vez está enfriando más ese 'sentimiento' europeo (si es que ha existido como tal), la creciente burocratización a la que someten todos los aspectos de la vida. Si ya era importante en nuestro país, cualquier tipo de relación con la administración se convierte en un papeleo indescriptible que consigue que muchas personas desistan en aspiraciones necesarias para aspectos cotidianos y profesionales. Pero bueno, eso es un aspecto que debe mirarse y arreglarse, más en una era digital en la que vivimos y en la que cada vez cuesta más entender por qué hay que seguir presentado una amplia documentación para todo cuando todo está disponible, al menos para las administraciones.
Pero bueno, este domingo nos enfrentamos a unas elecciones en las que se juega el modelo de la Europa que queremos, un modelo que debemos mirar de manera global y no local; por muy importante que sea lo nacional, que lo es, nuestros ojos deben mirar a Bruselas. Por supuesto que siempre desde nuestra tierra, meditando qué es lo que más conviene a una provincia como la nuestra, a la que a veces se nos presta más atención desde Europa que desde Madrid o Valladolid.